El miércoles 9 de julio, en Fuerte Tiuna, durante el 214.º aniversario de la firma del Acta de Independencia, el presidente Nicolás Maduro presentó un ambicioso plan para modernizar las capacidades militares de Venezuela, enfocándose en el desarrollo de sistemas de misiles, antimisiles, drones y tecnología antidrones.
En su discurso, Maduro enfatizó que “Venezuela es un país pacífico, pero responderá con contundencia ante cualquier agresión”, y exhortó a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana a elevar su moral y preparación. El objetivo, según comunicó, es fortalecer la defensa nacional en todos los ámbitos: terrestre, aéreo, marítimo y selvático.
Este anuncio se produce en un contexto de creciente presión internacional y sanciones, y se espera que los nuevos sistemas sean desarrollados con tecnología propia, en colaboración con aliados internacionales como Rusia.
El anuncio militar coincide con esfuerzos paralelos para consolidar una reforma constitucional —incluyendo penas de cadena perpetua para corrupción y traición—, lo cual sugiere un refuerzo del régimen a nivel político y de seguridad